CAMARA CIVIL - SALA K – 30/09/2025 “R., E. s/SUCESION AB-INTESTATO” | Una persona muerta no puede iniciar un juicio, ni sucesorio ni de ninguna otra especie.

Acá un abogado presentó un escrito de inicio supuestamente firmado en forma ológrafa por una señora muerta diez meses antes. El Tribunal nos recuerda que con la muerte la persona deja de existir (puede parecer una obviedad, pero no estoy segura de que a esta altura lo sea y por momentos no me cuesta imaginar que alguien venga a quitarnos ese nuestro más preciado tesoro con algún invento extravagante; es aterrador). Y que, aun cuando se tuviera por cierta la firma, la reglamentación para el uso de la firma digital o electrónica en los procesos judiciales presupone que la persona esté en condiciones de expresar su voluntad al momento de la presentación, que es cuando la normativa otorga fecha cierta a la pieza procesal. Por supuesto que se anuló todo, ¿qué otra solución cabía? Se dijo además que la situación excede el marco de las nulidades procesales y cae dentro de las nulidades absolutas que no pueden convalidarse y deben declararse aun de oficio. Pasan cosas raras en los Tribunales.

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